Hoy en día es habitual encontrarnos cerramientos en terrazas o balcones, ya sea para ganar más espacio en nuestras viviendas o bien porque el clima no nos permite disfrutar de ellos durante todos los meses del año.
Los cerramientos de terraza se pueden realizar por diversos motivos, y es una de las reformas más habituales que se suelen realizar. Aunque es habitual que nos surjan una serie de cuestiones sobre si podemos realizarla o cuál es el mejor modo para ello.
Hoy en Aragonesa de PVC queremos que conozcas una serie de cuestiones que debes saber antes de realizar el cerramiento de tu terraza o balcón.
Ventajas del cerramiento de terrazas
Son muchas las ventajas de optar por el cerramiento de la terraza. Cada vez más personas con terraza en sus hogares apuestan por un cerramiento de cristal para disfrutar de mayor espacio y comodidad.
Esta alternativa se lleva a cabo sobre todo en áticos, ya que permite usar una zona extra durante todo el año, que en los meses de invierno sería inservible, sobre todo en zonas frías como Aragón.
Ganar más espacio
Con unos metros extra, aprovecharías en mayor medida la superficie de tu hogar, adaptando la nueva estancia a tus necesidades.
Con un cerramiento de bajo peso, de PVC, puedes ganar otra habitación, un despacho, un invernadero y en pocos minutos convertirlo de nuevo en terraza.
Evitar ruido
Un cerramiento acústico es una muy buena idea para reducir el ruido y disfrutar de mayor tranquilidad. El PVC posee un buen perfil que no trasmite las ondas acústicas, un vidrio de gran grosor y cámara de aire.
Climatización
Colocar un cerramiento en una terraza es una gran opción para climatizar tu vivienda en invierno o verano. Este sistema actuará como barrera térmica, sobre todo si se realiza con materiales aislantes, como el PVC.
Además, con el acristalamiento podrás seguir disfrutando de las vistas y que corra aire en verano. Y mejoras la eficiencia energética de tu vivienda.
Limpieza
Los cristales dejan el viento, las lluvias, el polvo y la suciedad fuera de la terraza. Lo más recomendable es elegir un cerramiento en el que los cristales se abran hacia el interior, ya que su limpieza será más sencilla.
Privacidad y seguridad
Si el cerramiento es acristalado, con cristales ahumados o incluso espejados, o se complementa con persianas o cortinas, ganaremos en privacidad.
El cerramiento disminuye el riesgo de robo, aportando mayor seguridad en el interior de tu casa, sobre todo si no tiene demasiada altura.
¿Es legal cerrar la terraza en cualquier fachada?
En primer lugar, debemos tener en cuenta si se puede cerrar la terraza de la vivienda cuando está integrada en un bloque de edificios comunitario. Si se cierra la terraza o el balcón, integrando ese espacio en el piso, se le están añadiendo metros.
Esto no siempre es posible según la legislación urbanística y, además, también se está modificando la estética de la fachada, por lo que será necesario pedir una licencia al ayuntamiento y tener la aprobación de la comunidad de vecinos.
Es importante que te informes bien sobre este aspecto antes de comenzar las obras, ya que podrías enfrentarte a una sanción si no cuentas con los permisos necesarios.
¿Cuál es el material más óptimo para realizar el cerramiento?
Cada material cuenta con unos beneficios y unas desventajas. Los cerramientos pueden ser tanto de aluminio como de PVC o madera. El aluminio es uno de los materiales más empleados porque los perfiles son finos y se pueden emplear en cualquier color.
El PVC también es muy resistente y estanco, pero permite menos acabados que el aluminio. Aunque, gracias a este material, se consigue un aislamiento térmico y acústico.
¿Qué tipo de vidrio es el más adecuado?
Por norma general, se suele emplear un doble cristal con cámara de aire intermedia para poder asegurar un buen aislamiento. Podemos usar cristales templados que pueden variar entre 6, 8, 10 o 12 mm de espesor.
Para los climas más calurosos, se suelen instalar vidrios de baja emisividad y control solar.
¿Debemos tener en cuenta la orientación de la vivienda?
Es importante la orientación de la terraza o el balcón, ya que según su orientación se necesitará unas características determinadas u otras. Por ejemplo, una terraza orientada al norte necesitará de un buen aislamiento porque solo recibe luz directa en verano y en las primeras horas de la mañana.
Además, en invierno necesitará más calefacción, por lo que será fundamental contar con aislamientos de calidad para gastar menos energía.
Por otro lado, para cerrar una terraza orientada al sur se debe tener en cuenta que la incidencia del sol será la máxima y hay que instalar sistemas de protección solar.
Conociendo la orientación podremos saber los tipos de vidrios que instalar o si se necesitan sistemas de protección solar.
Mediante los cerramientos de terraza o balcón se pueden conseguir que se aísle mejor que la pared existente y así aumentar el aislamiento térmico. De esta manera también aumentará la calificación de eficiencia energética.
Esto puede ser útil para revalorizar la vivienda, ya que es necesaria la calificación energética para poder vender o alquilar una vivienda.
Si quieres realizar un cerramiento de terraza o balcón, no dudes en contactar con nosotros.